Aberdares es el bosque encantado de Kenia. Es un bosque encantado y lo mejor de todo, poco frecuentado. El viajero que piensa sólo en los “Big Five” (los cinco Grandes, es decir, el elefante, el león, el leopardo, el búfalo y el rinoceronte) sólo se acerca a las sabanas africanas. Ni se les pasa por la cabeza visitar este paraíso keniata.
El Parque Nacional de los Aberdares fue creado en 1950. Es el tercer parque más grande de Kenia. Ocupa 770 km² y comprende una franja longitudinal de norte a sur con una proyección hacia el este conocida como “El Saliente” que desciende hasta los 2.130 m cerca de la población de Nyeri. Posee cumbres de hasta 4.001 m. (Oldonyo Lesatima).
La mayor parte del paisaje está formado por una selva húmeda y lluviosa envuelta en neblinas, lo que le confiere ese aire de bosque encantado. Posee espectaculares saltos de agua, como el Keruru Kahuru de 270 m y el Gura de 240 m en el área sur, o las Chania Falls en el sector central del parque.
Por la elevada humedad, durante gran parte del año sus carreteras suelen estar embarradas, por lo que únicamente los vehículos 4×4 están autorizados a circular. Si quieres visitar este Parque no vengas en Matatu.
Alojamiento en Aberdares
La acampada está restringida desde que a principios de los años 80 varios campistas fueron atacados por leones. He leído que en la actualidad los campings públicos en Chania Falls y Queens Banda parecen estar de nuevo abiertos, pero no lo sé con certeza. El camping público Reedbuck es el único lugar de acampada autorizado en los altos páramos. Sus servicios incluyen leña, aseos, agua y refugio para la lluvia, pero no hay comida, así que si decides quedarte aquí, no olvides tus provisiones.
Para consultar los campings y efectuar reservas o concertar recorridos a pie, debes escribir al Warden, Aberdare National Park, P.O. Box 22, Nyeri.
Siguiendo las recomendaciones de amigos que ya visitaron Aberdares, decidimos alojarnos en The Ark.
El lodge imita la forma del Arca de Noé. Se compone de tres plantas con varias salas de observación y un búnker a ras del suelo desde los que podrás disfrutar (a escasos metros) de la fauna silvestre que se acerca a beber a la charca junto a la que está construido. Elefantes, búfalos, antílopes jeroglíficos, mangostas y facoceros son visitantes habituales de la charca. Rinocerontes, leones y hienas, con suerte, y con 3 padrenuestros, podrás verlos.
Si madrugas en The Ark y te diriges al búnker situado en la planta baja, podrás disfrutar de espectaculares imágenes de facoceros, búfalos y elefantes ¡¡¡Están a escasos metros!!!
De noche podrás seguir contemplando los animales gracias a los potentes focos que se activan cuando se avecina el ocaso. Pero claro está, supongo que no querrás estar toda la noche esperando los bichos. Tranquilo, todo está pensado: existe un servicio de timbre avisador que los vigilantes de la noche hacen sonar si aparece algún rinoceronte, león u otra especie. Si suena 1 vez ha aparecido un elefante, 2 toques es para el rinoceronte y 3 para el leopardo. Si suena 4 veces, otra especie de interés se habrá acercado. Te garantizo que el timbre consigue despertarte. El servicio de timbre despertador puedes desactivarlo si no estás interesado en que te despierten. Es gratis. ¡Ah, se me olvidaba! Por la mañana te despertarán sobre las 06:30 h. con una curiosa melodía electrónica.
Foto: Africa Travel Resource
El lodge cuenta con un excelente y acogedor salón con chimenea en el que podrás descansar y refugiarte del frío antes y después de la cena, a la vez que sales corriendo hacía alguna de las salas de observación para ver algún animal que se ha acercado a saludarnos.
Este lodge, junto a The Treetops, son las dos opciones más conocidas para alojarte dentro del Parque; eso sí, no son nada baratos, a no ser que tu agencia consiga regatearle el precio a los propietarios. Eso es lo que hizo el amigo Topo. No entiendo cómo lo consiguió.
Ambos lodge cuentan con hoteles base. En el caso de The Ark, el hotel base es el “Country Club” y en el caso de The Treetops, “el Outspan Club”. Pero, ¿qué es eso de hotel base? Había leído en los foros de internet, que a The Ark y a The Treetops, sólo podías ir de noche a dormir, y que únicamente te permitían acceder a estos lodges con el equipaje de mano. Tenías que dejar tu equipaje en el hotel base y te llevaban a dormir a The Ark o a The Treetops. Por tanto, te despertaban y salías de safari y las comidas había que hacerlas en el hotel base (salvo que quisieras llevarte al safari un lunch box).
La experiencia en The Ark me sugiere informarte que esto no es exactamente así. Es cierto que la comida has de hacerla en el Country Club (en el caso de The Ark), pero el desayuno y cena lo haces dentro del Ark. Y vaya comidas!!! El generoso buffet de The Ark nos hizo crear prejuicios gastronómicos en el resto de alojamientos. No vas únicamente a dormir. Por la tarde, después del safari, llegas directamente a The Ark, por lo que tienes tiempo de disfrutar de un buen té o café si consigues adivinar cómo abrir la tetera o cafetera de las que disponen junto a la chimenea (es gratis).
Lo que más llamó mi atención: jamás en mi vida imaginé que fuese a estar comiendo junto a tantos pijis europeos y americanos con mucha pasta. Los giros de cuello de izquierda a derecha cotilleando a quienes nos rodeaban eran inevitables. No teníamos ni idea dónde íbamos a meternos. Nunca habíamos pensado en algo así. Me sentía como Alfredo Landa en la película “Cateto a babor”.
En general, todo lo explicado para The Ark es aplicable a Treetops. Respecto a la elección entre los dos, depende de tu punto de vista. Si buscas una experiencia más romántica, que pueda acercarte aunque sea un ápice al espíritu de la antigua y misteriosa África, dicen que el Treetops es el sitio. También dicen de él que está hecho polvo, muy viejo. Si buscas algo de más comodidad, a costa de pagar algo más, los foros hablan de alojarte en The Ark.
En los hoteles de base para Treetops y The Ark, es decir, el Outspan y Country Club puedes igualmente alojarte. Si te alojas en el Outspan, es la opción más económica. El Country Club, probablemente sea la más cara de todas; no lo sé con certeza.
Día 2: Llegada a Aberdares. Primer Safari
La espesa cobertura vegetal que discurre mientras estás de safari, dificulta ver la fauna. No obstante, podrás ver fácilmente elefantes, búfalos, papiones, facoceros, hiloceros y varias especies de antílopes, como el cobo (waterbuck o antílope de agua), el duikero, el antílope jeroglífico o bushbuck. Los del parque dicen que abundan los leones, aunque nosotros no conseguimos verlos. Lo mismo nos pasó con el leopardo. Igualmente podrás ver algunas especies de primates como los colobos blanquinegros.
Respecto a las aves, en Aberdares se han registrado más de 200 especies, entre las que destacan el águila coronada, que suele alimentarse de monos y que tampoco conseguimos verla. A las charcas suelen acudir garzas de cabeza negra, gansos del Nilo, e ibis sagrados.
Día 3: Safaris en Aberdares
Si existe un momento emotivo vivido en Aberdares, ese fue sin lugar a dudas cuando, en nuestra segunda salida de safari, vimos cómo una manada de 13 elefantes se dirigía a la charca de agua que quedaba justo a nuestra espalda. Os cuento el relato:
Nuestro primer safari en Kenia prometía sorpresas. La mañana se presentaba fresca. Nuestro guía Milton había tomado dirección hacia la cascada de Keruru. Hacía tan sólo algo más de una hora que habíamos abandonado The Ark. La selva húmeda dejó paso a los bosques de bambú. Avanzábamos en coche a un ritimo adecuado. De repente, nuestro Milton nos advierte: look on the left!!! Many elephants!!!
Fueron las imágenes más pintorescas de todo el viaje. La belleza de los elefantes era sobrecogedora. La manada en silencio se acercaba en nuestra dirección. El largo frenazo del coche hizo que nos detuviéramos a unos 50 metros. Ahora estábamos justo tapando su paso.
Nuestro silencio era tan absoluto que casi dolía respirar. ¡No queríamos movernos! A medida que avanzaban enmudecíamos en aquel solitario paraje.
Una sensación de euforia invade nuestro cuerpo. Ahora el sonido es más elevado, las pisadas se escuchan por todas partes… La manada avanzaba ágilmente en nuestra dirección. Comencé a sentir el cosquilleo de la incertidumbre.
Al sonido de los pasos gigantescos, cada vez más cerca, le seguía el movimiento y sonido de la vegetación. Todo invadía el espacio, sin sonido humano…
Eran los sonidos de la naturaleza en su estado más puro. Uno de los ejemplares adultos alzó su trompa emitiendo un grito sobrecogedor. Nos lanzaba un mensaje. Estábamos invadiéndoles su paso. Teníamos que irnos de allí, o al menos avanzar unos metros. Y así hicimos, estábamos en el reino de los elefantes. Debíamos respetar a los reyes africanos (con todos mis respetos al señor león).
Nada más adelantarnos unos metros, los elefantes pudieron continuar su senda. Fue, como dije, el momento más emotivo en este rinconcito del mundo.
¿Por dónde deseas continuar?
Reserva Nacional de Buffalo Springs
Parque Nacional del Lago Nakuru
¿O prefieres …?
Antes de ir a Kenia. Datos de interés: cómo llegar, visado, moneda, alojamiento, el tiempo…
Hola Antonio,
voy tomando nota de tu información. Disfruté como un niño haciendo el safari en camping pero tengo pendiente la migración y ya ese viaje lo quiero hacer de otra forma y si es posible,centrándome más en los felinos. Ya me contarás el tema de presupuestos….el mayor enemigo de Africa.
De momento apunto a los chicos de Topo.
Un abrazo y que sigamos viendo fotos y relatos….
Hola Aitor,
Me alegro verte asomar por aquí de nuevo.
Algo parecido pienso yo, me gustaría regresar un día y dedicarme de lleno a captar imágenes con más acción. Las que he tomado prácticamente, salvo las del cruce, parecían que posaban para mí.
No te arrepentirás si vas con Topo Safaris, aunque mi experiencia es grata posiblemente gracias a Milton, nuestro guía. A ver si para entonces te hace un buen precio.
Abrazos.